- Enero. 13-1-2007. Visitamos el estudio del prestigioso y afamado imaginero Luís Álvarez
Duarte en el Aljarafe sevillano, y más concretamente en el pueblo de Gines. Nos desplazamos
Joaquín Riquelme, Jose Alfonso, Mari Carmen Bermejo y el que escribe estas palabras, Rafa
Ayllón. Le explicamos como veíamos a la Virgen, y le llevamos un repertorio de fotografías,
para que Él se pudiera hacer una idea de cómo se encontraba. Las estudió con detenimiento,
pero nos dijo que para poder hacer una valoración, tenía que desplazarse a Jaén para ver a la
Virgen. Después de un cambio de impresiones, que podían haber durado horas, por lo
agradables que fueron sus palabras, y por las anécdotas que nos contó sobre Antonio Eslava,
cuando El estaba como aprendiz, nos despedimos, quedando citados para el día 12 de Febrero
en Jaén.
- Febrero. 12-2-2007. Luís nos visita, aquí en Jaén, para hacer un reconocimiento de nuestra
querida Imagen de la Virgen de la Esperanza. A simple vista las impresiones de lo que vio, no
fueron muy buenas, aunque nos invitó a esperar a que nos mandara un informe mucho más
detallado. A continuación tuvimos un agradable almuerzo, en el cual intercambiamos unas más
que gratas y agradables impresiones con el prestigioso imaginero sevillano.
- Marzo. Recibimos el informe sobre nuestra Virgen. Lo que nos temíamos. Estado lamentable
de la policromía de la Imagen. Por lo que la restauración debe ser inmediata. Aunque para ello
hubo que esperar a que se formara la nueva Junta que saldría de las elecciones celebradas el
Viernes de Dolores, en las cuales la candidatura encabezada por Joaquín Riquelme volvió a ser
reelegida de forma aplastante.
- Abril. 26-4-2007. La nueva Junta de Gobierno, votó por unanimidad, que la Virgen fuera
restaurada por D. Luís Álvarez Duarte, tras haber leído el Hermano mayor, el informe enviado
por el escultor. Una decisión difícil de tomar, por la responsabilidad que conlleva, pero que no
se podía demorar más, ya que de haberlo dejado más tiempo, las consecuencias podían haber
sido lamentables para nuestra Sagrada Imagen.
Tras la cual se realizó un besamano extraordinario, al que asistieron numerosos cofrades, así
como representación del Colegio de Agentes Comerciales, a pesar de que no hubo tiempo para
informar del evento. Para la ocasión, la Sagrada Imagen, fue colocada en el Altar Mayor, en un
sencillo, pero bonito altar.
- Abril. 30-4-2007. Trasladamos la Virgen desde el Altar Mayor, hasta la capilla pequeña del
Santísimo, donde Camareras y Vestidor la prepararon para el viaje del día siguiente. La Imagen
fue colocada en un cajón, realizado especialmente para la ocasión, y así evitar cualquier
movimiento de la Misma en dicho traslado hasta Sevilla. Un traslado que se realizaría en la
furgoneta de Paco Díaz Ayllón, con todos los seguros y permisos oportunos para la ocasión.
- Mayo . 1-5-2007. 7 de la mañana. Tras una noche de dificultad para conciliar el sueño, ya que
es duro el tiempo que vamos a estar sin la Señora, y por la gran responsabilidad que ello
conlleva, nos disponemos a prepararnos para el viaje.
Un viaje, en el cual, no se iba a encontrar sola, ya que desde Jaén nos desplazamos cerca de
cuarenta personas, para lo cual hubo que alquilar un autobús, y así poder decirle hasta pronto a
nuestra querida Virgen. Fueron momentos de una emoción especial.
Sacamos el cajón con la Señora, y la pusimos en el porche de la casa de Luís, donde Javi Vilches leyó unas emotivas palabras de despedida, ante la atenta mirada de todos los que nos desplazamos. A continuación se le besó la mano y la llevamos hasta el estudio donde Luís estaría con Ella durante algo más de 7 meses.
Volvimos cerca de las 12 de la noche, con la tristeza de haber tenido que dejar a nuestra
Madre, pero con la alegría de saber que la habíamos dejado en buenas manos, y que cuando
volviéramos a por Ella, allá por el mes de Diciembre, nos la devolvería como todos queríamos,
más bella que nunca, y como su autor, Antonio Eslava, la creó.“Seguro que Ella por si sola, como bien dijo Luís, acallará muchas de las duras críticas
que estáis recibiendo.”
Luís, tras la firma del recibí, como entrega de una cantidad de dinero, nos indicó que aproximadamente a mediados de Junio podríamos realizar un viaje hasta su estudio, para ver las evoluciones de los trabajos. Un viaje que se esperó con impaciencia, para poder ver a Nuestra Virgen.
- Junio. 30-6-2007. Después de dos meses de larga espera, nos trasladamos la calurosa tarde de
verano del 30 de junio, al estudio de Luís, para ver para ver la evolución en la restauración de
nuestra querida Virgen. Tras explicarnos el proceso realizado con el candelero, pasamos a verla.
Fue un momento de máxima tensión y emoción, ya que no sabíamos como nos la encontraríamos, y efectivamente, la Virgen estaba más bonita que nunca, tapada con una tela blanca, a efecto de toca. Parecía una niña, indefensa.
Nos informó que ya le había retirado las lágrimas, y las pestañas, donde se encontró una
gran cantidad de pegamento y cera. A continuación nos enseñó en el lamentable estado en que
se encontraba toda la zona del escote y espalda, ya que tenía una gran cantidad de grietas,
algunas de ellas muy preocupantes, porque coincidían con el ensamble, y más si cabe, porque
estaban debajo de la policromía, y no se vieron hasta que comenzó la limpieza de esta zona.
Pero lo que más nos tranquilizó, aunque yo particularmente nunca tuve ninguna duda sobre la
profesionalidad de Luís, es que nuestra Esperanza era la misma de siempre, pero más bonita. Y
ahora entendemos las palabras de Luís, cuando nos dijo, el día que llevamos a la Virgen a su
estudio, que no hiciéramos caso de las críticas, ya que la Virgen por lo bonita que es, hablaría
por si sola cuando esté restaurada. Palabras que nos volvió a repetir cuando salíamos de su
estudio, y que por supuesto estuviéramos totalmente tranquilos, que la Esperanza iba a seguir
siendo la Esperanza de siempre.
Ahora ya sólo nos quedaba esperar hasta aproximadamente primeros de Septiembre, que
sería cuando volviéramos a Sevilla otra vez, para seguir las evoluciones de nuestra querida
Imagen, aunque Luís nos volvió a repetir que fuéramos cuantas veces quisiéramos.
- Septiembre. 29-9-2007. En los primeros días de otoño, y tras a ver pasado dos meses largos
de verano, nos desplazamos hasta Sevilla, Joaquín, Manolo y yo, como terna, así como Mª
Carmen Bermejo, mi mujer y camarera del Amor. La camarera Mayor, Esperanza Carrillo, Jose
Castillo, Francisco Carrillo, como vestidor y uno de los fabricanos de la Virgen, Santi Delgado,
con Mª luz Moreno, su esposa y camarera.
verano del 30 de junio, al estudio de Luís, para ver para ver la evolución en la restauración de
nuestra querida Virgen. Tras explicarnos el proceso realizado con el candelero, pasamos a verla.
Fue un momento de máxima tensión y emoción, ya que no sabíamos como nos la encontraríamos, y efectivamente, la Virgen estaba más bonita que nunca, tapada con una tela blanca, a efecto de toca. Parecía una niña, indefensa.
Nos informó que ya le había retirado las lágrimas, y las pestañas, donde se encontró una
gran cantidad de pegamento y cera. A continuación nos enseñó en el lamentable estado en que
se encontraba toda la zona del escote y espalda, ya que tenía una gran cantidad de grietas,
algunas de ellas muy preocupantes, porque coincidían con el ensamble, y más si cabe, porque
estaban debajo de la policromía, y no se vieron hasta que comenzó la limpieza de esta zona.
Pero lo que más nos tranquilizó, aunque yo particularmente nunca tuve ninguna duda sobre la
profesionalidad de Luís, es que nuestra Esperanza era la misma de siempre, pero más bonita. Y
ahora entendemos las palabras de Luís, cuando nos dijo, el día que llevamos a la Virgen a su
estudio, que no hiciéramos caso de las críticas, ya que la Virgen por lo bonita que es, hablaría
por si sola cuando esté restaurada. Palabras que nos volvió a repetir cuando salíamos de su
estudio, y que por supuesto estuviéramos totalmente tranquilos, que la Esperanza iba a seguir
siendo la Esperanza de siempre.
Ahora ya sólo nos quedaba esperar hasta aproximadamente primeros de Septiembre, que
sería cuando volviéramos a Sevilla otra vez, para seguir las evoluciones de nuestra querida
Imagen, aunque Luís nos volvió a repetir que fuéramos cuantas veces quisiéramos.
- Septiembre. 29-9-2007. En los primeros días de otoño, y tras a ver pasado dos meses largos
de verano, nos desplazamos hasta Sevilla, Joaquín, Manolo y yo, como terna, así como Mª
Carmen Bermejo, mi mujer y camarera del Amor. La camarera Mayor, Esperanza Carrillo, Jose
Castillo, Francisco Carrillo, como vestidor y uno de los fabricanos de la Virgen, Santi Delgado,
con Mª luz Moreno, su esposa y camarera.
Dicho viaje fue programado después de varias conversaciones con Luís durante el
verano, tras las cuales nos iba indicando las evoluciones de la restauración. Una restauración
que según él, iba formidable ya que el pasado verano no había sido demasiado caluroso, y eso
había influido de forma muy positiva en los trabajos sobre nuestra Virgen.
Aprovechando el viaje, se le hizo entrega a Luís de una segunda cantidad de dinero, ya
que desde que llevamos a la Virgen en Mayo no se le había vuelto a entregar nada más, a cuenta
por los trabajos realizados. Un dinero, que dicho sea de paso, él nunca nos pidió, ya que
siempre que hablábamos con él, nos decía que no hacía falta hasta el final. Mostrando una vez
más su confianza sobre nosotros, aún sin conocernos prácticamente de nada.
Tras un viaje lleno de nervios, por poder ver de nuevo a nuestra Virgen, después de justo tres
meses, llegamos a la casa de Luís. El recibimiento, igual que siempre, fue magnífico, y es que no
me cansaré de de repetir, que es como si fuéramos a casa de una persona a la que conocemos desde
hace mucho tiempo. Y es que Luís tiene esa virtud, la de hacer que te sientas como en tu propia
casa.
Y nada más entrar en su taller, nuestros ojos, como no podía ser de otra forma, se fueron de
forma absoluta hasta Nuestra Virgen de la Esperanza. Más bonita que nunca. Porque allí estaba
nuestra Virgen. Nuestra virgen de siempre, la Esperanza de Jaén. La que todos conocemos y
queremos, y no otra, como muchos quisieron hacer ver.
Después de rezar, dejamos al vestidor y camareras, para que pudieran probarle una de las sayas
que llevamos, para ajustársela bien al nuevo candelero.
Una vez realizada esta prueba, de forma más que satisfactoria, y tras mantener una amigable
charla, siempre interesantísima y formativa con Luís, en la que Joaquín le regaló un libro de la
historia de la Cofradía, y tras desvestir por parte de vestidor y camareras a la Virgen, nos
dispusimos a marchar de nuevo a Jaén, con la pena de tener que dejar de nuevo a nuestra
Esperanza, pero con la tranquilidad, más si cabe, de que se quedaba, sin duda en las mejores manos.
Porque no os podéis imaginar, con el cariño y la devoción que hablaba de nuestra Imagen. Y es que
Luís, además de ser el mejor imaginero de los últimos tiempos, por no decir del último siglo, es un
gran cofrade, y sabe mirar a una imagen. A él, le da igual que sea la Macarena, la Esperanza de
Triana , El Cachorro, o Nuestra Esperanza, para él todas se merecen el mayor de los respetos. Y
Eso es de agradecer. Porque seguro que otros, por el simple hecho de ser de Jaén, no nos tratarían
igual que si fuéramos de Sevilla.
Por último nos despedimos, quedando emplazados para una próxima visita en el mes de
Noviembre, y más concretamente para después de los Santos. Donde nos indicó que ya veríamos a
la Virgen con la policromía definitiva, a excepción de lágrimas y pestañas.
- NOVIEMBRE.. .. 18-11-2007. Domingo, 8 de la mañana, marchamos para Sevilla, en
nuestro penúltimo viaje, antes de recoger a la Señora. Un viaje lleno de emociones contenidas,
hasta que pudimos ver a la Virgen. Un momento indescriptible y esperado que no se puede expresar
con palabras. En un primer momento entramos al estudio de Luís, Joaquín, la camarera Mayor,
Esperanza, su vestidor Francisco y yo, como Vice hermano Mayor, para poner una saya a la
Virgen, y así de ese modo, todos pudieran verla. Una vez hecho esto, pudieron verla todos los
demás.
Lo que allí pudimos vivir, fue indescriptible, ya que después de tantos meses, pudimos ver a
nuestra Virgen, como hacía meses que no la veíamos. Una Esperanza como siempre ha sido Ella,
pero con la limpieza y la finura que Luís le ha dejado, después de esta más que acertada, o más bien
acertadísima restauración. Y ahora, sin lugar a dudas, ya que está totalmente restaurada, a falta tan solo de las lágrimas y pestañas, podemos estar, aunque algunos siempre lo estuvimos, totalmente tranquilos, ya que nuestra Esperanza es la de siempre, y que los fantasmas de gubias, que algunos
querían ver, han sido solo fantasmas, que estuvieron nada más que en su imaginación. Y Luís ha
demostrado, algo que no nos tenía que demostrar, que el prestigio, fama, etc… no se gana sólo con
ser un gran imaginero, sino siendo como es una gran persona.
Después de disfrutar de unos largos minutos observando a nuestra Virgen, así como haciéndole
todo tipo de preguntas, a Luís, a cerca del proceso de restauración, el imaginero sevillano se
sometió a una breve pero intensa entrevista, por parte de Francisco Carrillo, para el boletín de la
Hermandad, y algo que nos dejó a todos asombrados, fueron las palabras de Éste, sobre cuando iba
a empezar la restauración de la Virgen, cuando unos días antes fue a la capilla del Gran Poder,
imagen de la que es un gran devoto, y le dijo, “ Dios mío en ti pongo mis manos”.
Tras una charla amigable, nos despedimos de Nuestra Virgen, con la esperanza de que este mes
escaso que nos queda, para que vuelva a su casa de Cristo Rey, se pase lo antes posible, nos
despedimos. Quedando emplazados el 15 de diciembre para recoger a la Señora.
Así mismo se le hizo entrega de una nueva cantidad de dinero a cuenta de la restauración. Algo
a lo que él nuevamente nos volvió a decir que no era necesario y que al final de dicha restauración
hablaríamos. Demostrando una vez más la confianza que tiene en nosotros, cuando prácticamente
no nos conoce. Una vez más, Gracias Luís, por ser como eres.
La vuelta a Jaén, no fue triste como las otras veces que hemos ido, sino todo lo contrario,
alegre de haber visto a nuestra Esperanza más bella que nunca, y contado los días que quedan para
el 14 de diciembre.
- Diciembre. 14-12-2007. Por fin llegó el ansiado día, por fin nuestra Virgen está de nuevo con
nosotros. Parecía que el tiempo se haría eterno, allá por el mes de Mayo cuando llevamos a
nuestra querida Imagen a Sevilla para dejarla en las mejores manos, y si, ya está de nuevo entre
nosotros.
Fue el viernes 14 de diciembre cuando nos dispusimos a partir hacia tierras sevillanas, para
recoger a la Virgen. El viaje estuvo lleno de nervios y ganas de llegar a Gines, y ver como había
quedado definitivamente nuestra Virgen. Lo que allí pudimos vivir los que tuvimos la suerte de de
poder ir, fue algo indescriptible. Nos quedamos sin palabras ante la belleza que Luís había sido capaz
de sacar desde dentro de Ella. Tras unas emotivas palabras por parte de Luís, y una sentida oración,
nos dispusimos a preparar a la Virgen para el largo viaje hasta Jaén.
Después de casi tres horas de camino, llegamos a la Iglesia de Cristo Rey. La Expectación era
increíble. Algo más de ciento cincuenta personas esperaban, en una fría noche, a la Venerada Imagen.
Se sacó el cajón, por parte de algunos costaleros de la Virgen, y se situó a los pies de la escalera del
Altar mayor de Cristo Rey. A continuación la sacamos del cajón, para que todos los presentes pudieran
contemplar la maravilla que Luís había conseguido hacer con sus manos. Nuestro capellán realizó unas
oraciones y el vocal de cultos, Javi Vilches, leyó unas bonitas y emotivas palabras. Con un “ viva la
Virgen de la Esperanza “ y un calurosísimo y largo aplauso, se procedió a un improvisado besamano.
Los comentarios por parte de todos los asistentes no podían ser de lo más gratos. El más
escuchado era “ pero si es la misma, pero mucho más bonita “. Por último llevamos a la Virgen hasta
la capilla del Santísimo, donde su vestidor y camareras, la vestirían al día siguiente para la misa de
bienvenida, y para su triduo.
El día siguiente, sábado 15 de Diciembre, no pudo ser de lo más intenso y emotivo. Al medio día
comimos con Luís. Y a continuación, los miembros de Junta y camareras, quedamos a las 5,30h para poner a la Virgen en su altar. Dando comienzo a las 6.30h el rosario y a continuación la misa de
bienvenida a Nuestra Santísima Virgen. Destacando momentos antes del comienzo de la misa, de la
imposición de nuestra medalla de la Cofradía a D. Luís Álvarez Duarte, en agradecimiento por el buen
hacer con nuestra Bendita Madre.
Una misa en la que estuvimos acompañados por infinidad de fieles y devotos de Mª Santísima
de la Esperanza, así como de representantes de otras cofradías y del presidente de la Agrupación de
Cofradías de Jaén, y en la que nuestro capellán, D. Juan García Carrillo nos dirigió unas bonitas y
emotivas palabras durante la celebración.
A continuación nos dirigimos a un abarrotado salón de actos de la parroquia, donde Luís, tras
una magnífica, entrañable y emocionante presentación por parte de mi buen amigo Francisco
Carrillo, nos deleitó con una interesantísima charla-coloquio sobre todo el proceso de restauración
de la Virgen.
Una vez finalizada la charla, se le hizo entrega de un obsequio, en agradecimiento por todo lo
que Luís ha hecho por nuestra Virgen.
Y tras unas palabras de agradecimiento por parte de Luís se dio por finalizado el acto. Teniendo
a continuación una cena de convivencia con un numerosísimo número de cofrades y devotos d Mª
Santísima de la Esperanza.
Para finalizar este extenso informe, que comenzara allá por el mes de enero, y que refleja parte
muy importante de historia de esta Hermandad Sacramental, solo me queda por decir algunos
aspectos. En primer lugar, y estoy seguro de ello, es que nosotros no fuimos los que elegimos a
Luís para que restaurara a nuestra Virgen, sino que fue Ella la que quiso que este prestigioso artista
fuera el encargado de dejarla tan bella como se puede ver. De dejarla como Antonio Eslava la creó
en 1955. Por eso solo me queda nada más que agradecer a D. Luís todo lo que ha hecho por Ella. Y
los que hemos tenido la suerte de conocer a esta magnífica persona, nos hemos dado cuenta que la
humildad, la sencillez no está reñida con ser uno, si no el mejor, imaginero del Siglo XX.
Gracias Luís. Este trocito de historia de nuestra Hermandad que nos has hecho vivir y disfrutar,
no se olvidará nunca. Seguro que la Virgen de la Esperanza te lo premiará. Y gracias también a
todas las personas o instituciones que de una forma o de otra han colaborado en este proceso de
restauración.
Jaén, 16 de diciembre de 2007
Rafael Mariscal Ayllón
Vicehermano Mayor
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